A algunas cámaras les tocan dueños descuidados, tan descuidados que incluso la pobre camarita puede terminar en el suelo, en el agua, en la boca del perro y quién sabe en cuántos lugares más. Para la gente que no es cuidadosa, existe una cámara que es considerada prácticamente indestructible, la SeaLife Mini II, la cual ha tomado duras pruebas y ha vivido para contarlo.
La SeaLife Mini II es resistente a un montón de cosas, incluso me atrevería a decir que es a prueba de balas, pero como no lo sé, no lo diré. Lo que diré es que es capaz de soportar una profundidad de hasta 40 metros, y gracias a su modo submarino, también es capaz de sacar fotografías perfectas debajo del agua, sin la clásica mancha azul que aveces aparece. Pero hay más, lo que la hace un hueso duro de roer es una cubierta de goma que sirve tanto para las caídas como para aguantar una rueda, como vemos en la imagen de arriba.
Pero eso no es suficiente información, porque también es necesario saber que tiene una pantalla de 2,4 pulgadas, un sensor de 9 megapíxeles y dispone de una ranura para tarjeta SDHC de hasta 8GB. Demasiado bueno, ¿verdad? Y como es de esperarse tiene un par de contras, las cuales son la pobre calidad VGA de captura de video y el carecer de zoom óptico, el cual es sustituido por un zoom digital 3x.
0 Comentarios:
Publicar un comentario